El arquitecto Martín Hurtado analizó varios ejemplos donde la madera es protagonista, mientras que María Fernanda Aguirre abordó la arquitectura desde el punto de vista de la certificación de sustentabilidad ambiental.

 

Diversos proyectos donde la madera juega un rol protagónico fueron analizados en la segunda charla “Arquitectura, Diseño y Madera” que realiza Ignisterra, fabricante de puertas y otros productos elaborados en madera nativa de Lenga ((Nothofagus pumilio), especie nativa que crece solamente en el extremo sur de Chile y Argentina.

Martín Hurtado, arquitecto y profesor de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Católica, se refirió a varios ejemplos concretos de proyectos arquitectónicos en donde la madera ha sido protagonista.

“Las estructuras arquitectónicas deben dialogar con el paisaje que las alberga, ya sea un entorno urbano o rural”, destacó Hurtado, quien agregó que la madera, por sus propiedades estructurales y estéticas, es un material muy amigable y versátil.

Junto con enfatizar que es partidario de usar materias primas naturales en sus proyectos en vez de materiales plásticos y sintéticos que la emulan, Hurtado recordó que, según el tipo de madera y el lugar en que se instale la obra, es importante considerar aspectos como su tratamiento y cuidado. “Hoy existen tecnologías de construcción en madera que permiten usarla con éxito en un espectro muy amplio de aplicaciones y lograr que se conserve en excelente estado y por mucho tiempo”, aseguró.

Certificaciones para una arquitectura sustentable

María Fernanda Aguirre, encargada técnica del Área Proyectos y estudios de Green Building Council Chile, expuso sobre la sustentabilidad y la certificación LEED en las construcciones en madera.

La especialista enfatizó que, desde el punto de vista de la sustentabilidad ambiental, la huella ambiental de los materiales de construcción es muy relevante, por lo que instó a los arquitectos a considerar este atributo al momento de elegir los materiales.

 “Los edificios no solo se construyen, sino que también se ocupan, y en ese sentido hay que analizar la durabilidad del material con que se lo construye a lo largo del tiempo y el impacto ambiental que tiene su mantención y su recambio”, sostuvo.

En ese sentido, comentó que la madera es el material de construcción que genera menos impacto ambiental si se consideran aspectos como el uso total de energía para su fabricación y la generación de residuos y otros que inciden en el efecto invernadero. “Por todo esto, la madera sigue siendo el material más sustentable para construir”, declaró.

En cuanto a la certificación LEED, la ejecutiva indicó que antes de ser otorgada, se verifica que al menos el 50% de los proyectos en madera estén certificados como de manejo forestal sustentable, “y que la sustentabilidad del material se mantenga a lo largo de toda su cadena de abastecimiento”, puntualizó.

Madera de lenga certificada y sustentable

El objetivo de este ciclo de encuentros que organiza Ignisterra en su Showroom de Vitacura es destacar el gran potencial para la arquitectura y la construcción que tiene la madera cuando se la trabaja con ingeniería y las tecnologías adecuadas, abordando distintos aspectos de su uso en arquitectura y diseño.

En el caso de la Lenga, se trata de una madera fina, elegante, de hermosa veta y tonalidad, y muy dócil para trabajar, por lo que es muy apreciada por mueblistas, diseñadores y arquitectos. En otros países se la conoce como Cerezo Chileno, dada su similitud de veta y color con el cerezo norteamericano.

Ignisterra cultiva en más de 15.000 hectáreas de sus propios bosques de Lenga en la lejana y mística Tierra del Fuego, recurso renovable que maneja con estricto apego a criterios de sustentabilidad. En 2009, fue la primera empresa forestal chilena en certificar el manejo responsable y sustentable de los bosques nativos en Chile bajo las exigencias del sello internacional FSC® (Forest Stewardship Council).

El evento, en el cual participaron arquitectos, diseñadores, ingenieros, constructores y amantes de la madera, concluyó con un ameno cóctel y el nuevo sorteo de un viaje a Tierra de Fuego, para conocer los bosques de Lenga y el aserradero, además del hotel Parador Russfin, que Ignisterra posee en esa hermosa y mágica zona del país. Esta vez, el premio recayó en el arquitecto Alberto González Capitel, del estudio José Cruz Ovalle.

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